En el webinar de SERNAUTO “Proveedores de automoción ante la crisis del Covid-19. Retos y oportunidades”, Francisco J. Riberas, presidente de Gestamp, ya apuntaba que la actual coyuntura había llegado al sector, entendido de forma global, cuando ya se encontraba en un momento difícil. Esa dificultad tiene una causa fundamental: la sobrecapacidad. Y esa sobrecapacidad ha sido el principal argumento esgrimido por la dirección mundial de Nissan para anunciar la dramática noticia que supone el cierre de la actividad industrial de Nissan en Cataluña.
Se trata de un brutal mazazo primero para las 3.000 personas que perderán su empleo en las instalaciones de Zona Franca de Barcelona, Montcada y San Andreu, y después para el conjunto de la industria de automoción española. Desde la crisis de 2008, la pregunta recurrente solía ser “¿cuántas plantas españolas de producción de vehículos se pueden ver obligadas a cerrar? El tiempo iba transcurriendo y todas las factorías iban consiguiendo mantener, de forma razonable, su posición con sucesivas adjudicaciones de modelos. Sin embargo, la mencionada sobrecapacidad y, posiblemente también, la lenta transición hacia el vehículo eléctrico han llevado a los responsables de Nissan a tomar la peor decisión posible para las plantas catalanas del constructor japonés.
En un entorno de máxima incertidumbre por el fantasma del coronavirus, la situación a la que se ha visto abocada la base industrial de Nissan, así como (otro tremendo golpe) su actividad de I+D en el Nissan Technical Center Europe (NTCE), constituyen un serio aviso para el resto de factorías españolas. El saber hacer y la probada competitividad de las industria constructora y proveedora de automoción en España han sustentado al sector durante décadas. Ahora, el seísmo de la pandemia está haciendo aflorar medidas proteccionistas en un sector en el que España tiene una fuerte dependencia de las decisiones que se toman fuera de nuestro país, como se ha comprobado en el triste desenlace para Nissan en Cataluña.
Como también se dejaba claro en el mencionado webinar, la incierta etapa que va a vivir el sector a escala global en los próximos años, requiere una doble visión, tanto a corto como a largo plazo. Por un lado, de forma urgente, es prioritario buscar fórmulas para incentivar la demanda a escala europea y también global. Las plantas españolas y, en consecuencia, toda la cadena proveedora ha dependido fuertemente de las exportaciones. Automoción es un sector de volúmenes y para que las plantas retornen al máximo grado de normalidad es imprescindible que se reactiven los mercados de destino, así como el local.
En segundo lugar y volviendo a la reflexión del presidente de Gestamp en el webinar organizado por SERNAUTO el 21 de mayo, también impulsada por ANFAC y SERNAUTO, resulta absolutamente necesario definir una estrategia país para apuntalar a un sector esencial para la economía española, Del acierto en la toma de decisiones y en nueva vuelta de tuerca para probar a las casas matrices que España sigue siendo una opción de garantías para nuevos modelos dependerá el futuro de la industria española de automoción.
Artículo de opinión de José López-Tafall, director general de ANFAC, para el Balance del año 2024 de AutoRevista, sobre el que fue un año "de luces y sombras para el sector de la automoción en España". Un año que, a su juicio, "nos dejó avances, pero muy insuficientes si queremos estar en la primera línea de la transformación industrial y en línea con los objetivos medioambientales que Europa se ha autoimpuesto".
La automatización, la conectividad, la electrificación, la seguridad vial y la digitalización son algunas de las tendencias tecnológicas que están marcando y marcarán la evolución del sector de la automoción en los próximos años. Y es que, tal y como recientemente explicó la Asociación Española de Proveedores de Automoción en su blog, el sector de la automoción ha estado inmerso históricamente en una constante evolución y esta década no iba a ser una excepción. Una información de Irene Díaz.
Las ventas de vehículos electrificados siguen aumentando y logran un notable incremento del 133,3% en junio, con 27.207 unidades, que supone el 19,31% del mercado total. Con esta cifra se vuelve a superar al mes anterior, batiendo de nuevo el récord histórico de ventas en un mes.
Los nuevos EBRO s700 y s800 PHEV, con una potencia combinada de 279 CV y más de 1.100 kilómetros de autonomía total, marcan un punto de inflexión en el mercado de los SUV híbridos enchufables.
La industria metalúrgica y siderúrgica mundial está inmersa en una época de gran inestabilidad debido a varios factores que afectan de manera directa al crecimiento del sector como son los nuevos aranceles, la transición hacia una energía limpia y el exceso de producción por la sobreoferta.