BASF, el mayor proveedor químico de automoción, ha anunciado la construcción de un nuevo centro de produción de materiales para baterías en Schwarzheide, Alemania, dedicado a la generación de materiales activos catódicos (CAM). La inversión forma parte del programa de apoyo a la cadena de valor de los vehículos eléctricos europeos de la Comisión Europea.
La planta tendrá una capacidad de suministro inicial de 400.000 vehículos eléctricos. La factoría se pondrá en marcha previsiblemente en el año 2022, al tiempo que abrirá la planta BASF de Harjavalta, Finlandia, dedicada también a la generación de activos catódicos de alto níquel. De hecho, el centro de Schwarzheide empleará precursores (PCAM) de la planta finlandesa. Así, en 2022 BASF se convertirá en el primer proveedor de CAM con capacidad de producción local en Asia, Estados Unidos y Europa.
La planta de producción de Schwarzheide utilizará una planta de energía de turbina de gas y vapor de eficiencia energética, mientras que la de Harjavalta empleará recursos de energía renovable, como hidroeléctrica, eólica y biomasa, lo cual reducirá a mínimos la huella de CO2.
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