Sandvik Coromant desarrolla mecanizado para vehículos eléctricos

Sandvik Coromant, referente global en el campo de herramientas de corte y mecanizado, argumenta que los automóviles de Tesla suelen usarse como ejemplo de que los vehículos eléctricos no necesitan múltiples engranajes o transmisión dual. Sin embargo, dado que la tendencia de los modelos eléctricos de varios engranajes está intensificándose, Mats Wennmo, director general de transmisiones de automoción de Sandvik Coromant, el — explica cómo un proceso conocido como el power skiving puede ayudar a los fabricantes de modelos eléctricos a adoptar esta tendencia con tiempos de mecanizado muy reducidos.  

Los vehículos modelo S, modelo X y modelo 3 de motor dual de Tesla presentan dos engranajes diferentes, uno delantero y otro trasero. El potencial de los VE con múltiples engranajes ha sido explorado por Porsche, que ha confirmado que su vehículo eléctrico Taycan tendrá una caja de cambios de dos velocidades. Los vehículos eléctricos de Polestar, Volvo, Lucid y Volkswagen también tienen transmisiones, pero estas transmisiones no son como las que se tenían en el pasado. Entre las nuevas tecnologías se encuentra una  anunciada por ZF, el proveedor de primer nivel de diversos sistemas para vehículos.

Para Mats Wennmo, la mejor forma de fabricar estos componentes de transmisión de mayor calidad se encuentra "en un concepto que nos acompaña desde hace más de un siglo: power skiving. El proceso combina la conformación y el tallado con fresa madre —un proceso de mecanizado para tallado de engranajes— en un único proceso de corte continuo.

Según el experto de Sandvik Coromant, el power skiving presenta múltiples ventajas frente al método de mecanizado tradicional, además de mayor productividad y flexibilidad. Al usar este método, se puede mecanizar un componente completo en una máquina multitarea o centro de mecanizado con un único reglaje. Esto reduce el tiempo de producción, mejora la calidad y reduce los costes de manipulación y logística. El proceso también contribuye a ofrecer un mecanizado de componentes más manejable y predecible.

Dado que el mecanizado se desarrolla en un mismo reglaje, esto elimina la necesidad de utilizar múltiples máquinas especializadas y cambios de máquina. Para los fabricantes de automoción —para los que el tiempo improductivo es extremadamente costoso—, reducir los cambios de máquina puede tener un gran impacto en sus resultados finales.

Por otro lado, la multinal sueca ha ampliado, recientemente, su red de centros de reacondicionamiento de herramientas mundial con la inauguración de una nueva planta en la ciudad italiana de Rovereto. Este centro ofrece a sus clientes un servicio de reacondicionamiento para sus herramientas rotativas enterizas con el soporte experto del equipo de ingeniería de Sandvik Coromant. El servicio posventa forma parte de la filosofía de la empresa en pro de la fabricación sostenible; ofreciendo a sus clientes una solución rentable y eficiente para la gestión de sus herramientas.

El nuevo centro de reacondicionamiento de herramientas en Rovereto (Italia).

Como parte de su iniciativa para gestionar el reacondicionamiento de sus herramientas a escala local, Sandvik Coromant ha creado varias instalaciones a lo largo de Europa, Asia y América. Ahora, el nuevo centro de Rovereto servirá a los clientes de los mercados de Italia, España y Portugal.  Los centros de reacondicionamiento permiten a los fabricantes restaurar sus herramientas rotativas enterizas a su calidad original. En lugar de pagar el alto precio de una herramienta completamente nueva, el servicio permite a los clientes de Sandvik Coromant mantener sus brocas, fresas de ranurar y escariadores de metal duro enterizos con la máxima calidad.

Desde Sandvik explican que el proceso de reacondicionamiento es muy sencillo. Tras recoger las herramientas usadas del cliente, el proceso de inspección de Sandvik Coromant determinará si la herramienta se puede reacondicionar. Si la inspección es favorable, la herramienta será sometida a una restauración completa de su geometría basándose en las especificaciones originales de la herramienta. Esto incluye un nuevo recubrimiento y la reducción de la longitud de la broca y el diámetro de la fresa de ranurar antes de devolver la herramienta al cliente en su embalaje original, con bandejas de espuma para su protección.