Alise, proyecto para aumentar la duración de la batería en el vehículo eléctrico
Investigadores del centro tecnológico de la Universidad de Navarra, Ceit-Ik4, trabajan codo con codo con colegas de otros 15 centros, empresas y universidades europeas para conseguir aumentar la duración de las baterías de los coches eléctricos, así como lograr su comercialización instalándolas en los PHEV (vehículos híbridos eléctricos enchufables) y FEV (100% eléctricos).
La limitada autonomía de este tipo de vehículos es el principal escollo en su evolución, por lo que los investigadores del proyecto Alise trabajan en una nueva batería que aportaría al utilitario una duración mayor a la actual.
Alise, financiado por la Unión Europea dentro del programa Horizon 2020, cuenta con un presupuesto de 7 millones de euros y un equipo de 15 socios. Se trata del único proyecto que pretende lograr la integración de las baterías de Litio-sulfuro en los PHEV.
El objetivo final de los investigadores del Ceit-IK4 es monitorizar la degradación de la batería mediante sensores embebidos y el desarrollo de algoritmos que permitan la correcta gestión de las baterías.
Patrik Eurenius, director de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Salud y Seguridad en Sandvik Coromant analiza la importancia de medir la sostenibilidad de la fabricación ahora que la empresa lanza su nueva herramienta de análisis.
Nissan ha presentado a los medios su línea piloto de baterías de estado sólido en su planta de Yokohama, en la prefectura de Kanagawa. Siguiendo la visión Nissan Ambition 2030, la firma lanzará vehículos eléctricos con estas baterías en el año fiscal 2028.
Siemens Digital Industries Software ha hecho público que Emotors ha aprovechado las soluciones de prueba de la cartera Siemens Xcelerator de software industrial para desarrollar y mejorar sus sistemas de e-drive para híbridos, plug-ins y vehículos eléctricos completos (EV).
Atesora una amplia amplia experiencia en empresas relevantes del ámbito de la logística.
La fábrica de Volvo en Taizhou se ha reconvertido al biogás, con lo que ha pasado a ser la primera factoría de la firma en China en alcanzar la meta de la neutralidad climática. El cambio de gas natural a biogás supondrá una reducción de más de 7.000 toneladas de CO2 al año.