Renault viste a su Nuevo ZOE con productos textiles 100% reciclados

El Grupo Renault, inmerso en una estrategia creciente de incorporación de materias recicladas a sus vehículos, inició en 2015 el proyecto bautizado como Àfiler, junto a la empresa francesa de hilado Filatures du Parc y Adient Fabrics France, proveedores de tejidos para asientos de automóviles; con el fin de diseñar un producto textil único, fabricado de manera exclusiva a partir de materiales reciclados.

Gracias a su dominio del hilo cardado y a las innovaciones desarrolladas de forma conjunta, este producto textil, que está producido a partir de cinturones de seguridad, retales de telas procedentes de la industria del automóvil, así como fibras de poliéster extraídas del reciclaje de botellas de plástico, reviste a partir de ahora al Nuevo ZOE en los acabados Zen e Intens.

Con una superficie total de 8 m², este tejido se utiliza para fabricar fundas de asientos, el revestimiento del salpicadero, el acabado de la palanca de cambios y los embellecedores de puertas.

El suministro y la fabricación en ciclo corto del hilo cardado reciclado (sin transformación química o térmica) permiten reducir en más del 60 % las emisiones de CO2 con respecto al tejido anterior de ZOE, fruto de un proceso de fabricación estándar, según indican desde Renault.

Pionero en economía circular

Además de la fibra reciclada, el Grupo Renault implanta numerosos ciclos de materias, principalmente el cuero, el plástico, los MGP y los metales férreos y no férreos. Nuevo ZOE incorpora también 17,5 kg de plástico reciclado.

Y una parte de este plástico se utiliza por primera vez en la gama Renault en piezas visibles en el habitáculo, como la ebanistería interior de polipropileno en la parte inferior.

Por otro lado, a través de su entidad Renault Environnement y su filial Gaia, el grupo está desarrollando un amplio abanico de actividades propias de la economía circular, como el tratamiento de los vehículos al final de su vida útil (mediante su filial Indra en colaboración con Suez), la valorización de los metales (Boone Comenor, también en colaboración con Suez), la reparación, el embalaje o el reciclaje de las baterías eléctricas, o incluso, el remanufacturing (renovación de piezas mecánicas y diferentes componentes usados) en la fábrica de Choisy-Le-Roi.

“Ante el desafío de la transición energética, las industrias deben esforzarse por progresar en sus modos de producción y reducir su impacto en el medio ambiente”, afirma Jean-Philippe Hermine, director de Stratégie & Plan Environnement del Grupo Renault, “con el apoyo de nuestros socios, Filatures du Parc y Adient Fabrics France, demostramos que es posible implantar modelos de desarrollo circulares y competitivos basados en los recursos, adquiriendo a la vez una valiosa ventaja competitiva en el momento en que la disponibilidad y el coste de las materias primas se conviertan en un auténtico pilar estratégico.

“Asimismo”, continúa, “este enfoque contribuye al compromiso del grupo con la reducción del impacto ambiental de cada vehículo a lo largo de su vida útil y la disminución de su huella de carbono mundial en un 25 % en 2022 con respecto al año 2010”.