Volkswagen da un nuevo enfoque a la colaboración persona-robot

El área de Producción del Grupo Volkswagen ha desarrollado un prototipo para la cooperación entre personas y robots industriales sin barreras de seguridad rígidas. Mediante un sistema de patrones luminosos con los colores de un semáforo se garantizan la seguridad de los operarios sin necesidad de uso de barreras de protección. El prototipo desarrollado confirma, según el consorcio, la viabilidad técnica de esta forma de cooperación y un concepto de seguridad completamente nuevo.

Así, cuando el empleado se halla en una zona iluminada en verde, puede caminar con seguridad hacia el robot. Tan pronto como pisa la primera zona amarilla, el robot se ralentiza. Cuando el trabajador alcanza la zona roja, el robot se detiene de golpe. Si sale de la zona roja, la máquina vuelve a activarse. Este avance se ha hecho posiible gracias a un escáner de seguridad láser, capaz de detectar con precisión el movimiento del empleado. Un sistema de control de alto nivel coordina los movimientos tanto del trabajador como del robot, ralentizando o deteniendo a éste, cuando el trabajador entra dentro de las zonas de seguridad relevantes.

El Dr. Martin Gallinger, responsable del desarrollo continuado de aplicaciones robóticas en Producción del Grupo Volkswagen, explica por qué las zonas de seguridad dinámicas son tan importantes para la producción del futuro: "Hasta la fecha, nos hemos centrado principalmente en la cooperación con robots ligeros, que pesan bastante menos y transportan cargas más ligeras. Lo que ahora queremos es hacer que los robots industriales sean capaces de cooperar con humanos. Serían capaces de reducir el desgaste de los trabajadores, ya que los robots industriales pueden llevar componentes mucho más pesados y dejarlos en manos de personas". Otra ventaja reside en el hecho que los robots actuales también pueden usarse para la cooperación con personas, lo que permitiría ahorrarse la inversión necesaria para adquirir nuevos robots.

Volkswagen ha llevado a cabo este desarrollo en colaboración con Kuka, Keyence y el Instituto Fraunhofer IFF. "El siguiente paso será someter el prototipo a una intensa fase de prueba y optimización junto a nuestros socios de proyecto, expertos en salud y seguridad y empleados de producción. Nuestra intención es usar sus comentarios para desarrollar juntos el sistema, hasta que sea apto su uso en la producción en serie", añadió Gallinger.