Schuler crea la línea de prensado de alta velocidad Servoline L

El fabricante alemán Schuler ha construido una nueva línea de prensas, denominada Servoline L, dotada de alimentador de barra (“crossbar feeder”) y capaz de alcanzar una velocidad de 23 golpes por minuto. La herramienta ha sido implantada en la factoría de un constructor de vehículos Premium y, con su velocidad de operación, los responsables de la firma destacan la capacidad de la línea para facilitar un gran rendimiento y flexibilidad, así como menores costes por pieza y mayor eficiencia energética.

Tal y como señala Klaus Linnig, director general de la División de Automoción de Schuler, “Servoline L de Schuler constituye una contribución decisiva para incrementar la eficiencia económica necesaria en los talleres de prensas modernos. Solo podíamos alcanzar velocidades tan altas rediseñando completamente el alimentador de barra para facilitar el transporte rápido y fiable de piezas”.

En la primera fase del proceso, dos barras de alimentación de Schuler toman las planchas (“tailored blanks”) y las sitúan en la cinta de transporte. Si es necesario, las planchas son lavadas, lubricadas y colocadas en la estación de centrado óptico. Una cámara registra su posición y envía los datos a dos robots, que las colocan de manera exacta para que el alimentador de barras las sitúe de forma precisa en la primera prensa.

El alimentador traslada las piezas de prensa en prensa. En este sentido, la nueva generación aporta dos servoejes adicionales que hacen posible reorientar piezas más complejas. Pueden ser rotadas de forma independiente, giradas o situadas en los ángulos más adecuados para su transporte, y esta flexibilidad para el cambio de posición favorece nuevas posibilidades de diseño de las matrices. Tras la fase de conformado, dos robots las toman y sitúan las cintas de transporte. De esta forma, el cambio totalmente automático de matrices y utillaje puede realizarse en tres minutos, lo que da como resultado una mayor flexibilidad y eficiencia en el taller.

En palabras de Klaus Linnig, “Servoline L marca un hito en la producción en masa de componentes de carrocería para automóviles. Equipada con los sistemas de automatización de Schuler y la tecnología ServoDirect, garantiza elevados niveles de productividad y eficiencia”.